Llegamos a casa y subí corriendo a mi habitación, abrí mi armario y empecé a buscar algo que ponerme para la cena con los McCall. Sí, era cena, pero mi padre querría ir antes para hablar con Peter McCall de sus asuntos. Lo que me dejaría a mí más tiempo para estar con Drake, su hijo. ¡Yujú! Noten mi sarcasmo.
Oí entonces que mi padre me llamaba.
¡Díos mío habíamos llegado por los pelos!
-¿Christine? ¿Christine estás aquí?
Entró en mi cuarto.
-Claro papá, ¿dónde sino? Estoy viendo qué puedo ponerme. ¿Tú qué crees?
Pedirle consejo a mi padre sobre mi estilismo no era lo más acertado, pero, ¿qué hacer si no?
-No sé hija, pero ve algo arreglada.
-¿Por qué? ¿No puedo ir cómoda?
-Intenta ir de las dos maneras. Te avisaré cuando nos vayamos, ¿de acuerdo? No podemos tardar mucho, ya que su casa está en la otra punta de la ciudad y tengo asuntos sobre los que hablar con Peter.
-Vale papá, no tardaré en vestirme.
¿Veis lo que os digo? Siempre igual.
Mientras esperábamos para irnos, me puse a hacer los deberes. Cualquier día me cansaría y dejaría de ir a ese instituto. En cuanto cumpliera los dieciocho. En cuanto lo hiciera podría depender totalmente de mi fortuna y hacer lo que quisiera. Y más o menos tenía una idea lo que iba a hacer. De esto mi padre no tenía ni idea, claro.
Acabé los deberes y decidí vestirme.
Me puse esto:
Y me calcé unos tacones justo en el mismo momento en el que mi padre aporreba la puerta para indicarme que ya teníamos que irnos.
-¡Ya voy!
Cogí un bolsito pequeño, metí unos chicles, algo de brillo de labios y el móvil. Ahora ya no podía vivir sin él, ya que era lo único que me mantenía en contacto con Niall.
Bajé las escaleras pensando en lo curioso que era todo. Era un chico al que había visto dos veces y, sin embargo, me sentía unida a él de alguna manera. ¿Sería porque representaba lo que yo quería, libertad y dedicación a la música? ¿O sería porque me ofrecía algo de cambio en mi vida?
Me senté en la parte de atrás del coche mientras que Ryan, nuestro chófer y mi padre se sentaban delante.
Nos quedaba como más de media para llegar a casa de Drake y yo ya quería volverme a la mía. ¿Por qué tenía que verle de nuevo? ¿Es que no bastaba con verle en el instituto?
Me sonó el teléfono, lo miré y vi que Niall me estaba hablando.
Sonreí sin querer.
"Me ha hecho mucha ilusión verte aquí esta tarde. De verdad, gracias. Me has alegrado el día, no me lo esperaba (: xx"
Le respondí inmediatamente.
"Mi padre ha estado a punto de pillarme, pero el riesgo ha merecido la pena por verte sonreír. ¿Nadie te ha dicho que tienes una sonrisa muy bonita? Y, aunque no puedo verte, sé que en estos momentos te estás poniendo rojo (;"
Miré por la ventana esperando su respuesta.
Me sorprendí al escuchar el sonido de una llamada en lugar del sonido del chat. Lo cogí.
-¿Si?
-Hola, rubia. ¿Qué tal?
-Odio que me llamen rubia.
Le oí reír.
-Y yo odio que digas que me pongo rojo cuando no es cierto.
-Pero es que sí que es cierto.
-Y tú eres rubia, ¿no? Pues entonces puedo llamarte así.
-¿Y si yo te empezara a llamar rubio?
-No tendría sentido porque soy teñido.
-¿En serio? Ya sé algo más de ti.
Mi padre giró la cabeza para mirarme y supe que tenía que actuar.
-Entonces Marta, ¿sigue en pie lo de mañana?
-Tu padre está ahí, ¿no?
-Sí.
-Vale, tú sigue así que lo estás haciendo bien. Lo que quería decirte. En serio, no sabes la sorpresa que me he llevado al verte aquí antes. Aunque fuera una visita corta, me gustó. Gracias por jugarte el cuello así por verme aunque fueran unos tristes cuatro o cinco minutos.
-Sabes que no pasa nada. Lo hice porque tenía que hacerlo. Yo también quería verte, tonta.
Niall reía.
-No me acostumbro a ser tu amiga Marta. Entonces, ¿mañana al final quedamos?
-¡Por supuesto! Necesito una tarde de chicas ya.
Más risas por su parte.
-Lo cuento y no me creen... ¿A qué hora?
-Pues no sé chica, ya sabes la hora a la que salimos del instituto y si luego tengo que hacer los deberes... ¿Sobre las seis?
-Sobre las seis me parece perfecto. Yo te llamaré.
-Perfecto. Nos vemos mañana, Marta. Besos.
-Adiós rubia.
Colgué y metí el móvil en el bolso mientras miraba de nuevo por la venta y sonreía.
Podría sobrevivir a la cena con Drake ahora que sabía que mañana vería a Niall.
Finalmente llegamos a casa de Drake. Aunque era una casa grande no podía compararse a la mía. Drake, al igual que Alice, luchaba por ganarse un puesto en el Top 10 fortunas en el instituto y, al no poder entrar por su dinero, la mejor manera era relacionándose con alguien que tuviera más. En el caso de Drake, ese alguien, por desgracia, era yo.
Entramos en la casa y tardamos un poco en llegar al salón principal, donde esperaban los McCall y, por supuesto Drake.
Mi padre se puso a hablar con Peter mientras que la madre de Drake se fue a la cocina a supervisar la cena. Me senté en el sillón y puse una pierna sobre la otra, intentando que no se viera lo molesta e incómoda que estaba en aquel sitio y con aquellas personas. No tenía nada en contra del señor y la señora McCall, pero si estaban allí significaría que Drake también.
Este no tardó en sentarme a mi lado en el sillón.
Miré hacia otro lado con fastidio.
No me gustaba para nada la manera en que miraba mis piernas.
-Cuánto tiempo sin vernos, Chris.
-Ojalá hiciera mucho más, Drake.
-¿Por qué eres siempre tan brusca conmigo? Si yo sólo quiero que nos llevemos bien...
-No mientas Drake, quieres llevarte bien con mi dinero no conmigo.
Chasqueó la lengua.
-Eso no es del todo cierto. Tu dinero me importa, es cierto, como me importaba el dinero de las demás chicas con las que salí... Pero tú eres diferente. Puedes decir que eres afortunada, puesto que, al contrario que las demás, tú algo me importas.
-Es ese "algo" lo que te hace un ser despreciable.
-¿Ves lo que digo? Ninguna se fija en mi forma de ser, sino en mis ojos... Porque quieren lo que quieren. Y yo, se lo doy.
-Claro, como un caballero, ¿no?
Sonrió.
-Entonces vas a la fiesta conmigo, ¿no?
-Sss no.
-Oh, vamos Christine... No me hagas tener que pedírselo a alguna de tus amigas.
-¿Por qué no lo haces?
-No tienen tanto dinero como tú.
Apreté los labios para no darle una bofetada.
-Pues hablas mucho con Caitlin como para que no te interese su dinero...
-Me interesa y ella es guapa. Y parece estar interesada en mí, ¿quién sabe? Quizá algo pueda surgir de ahí...
-Ni. Se. Te. Ocurra.
Rió.
Iba a darle un puñetazo en su perfecta cara a pesar de lo que pudiera pasarme a mí después cuando nos anunciaron que la cena estaba lista.
Me levanté del sillón y me fui de allí con aire enojado y orgulloso. Drake me siguió con una pícara sonrisa.
Nos sentamos en la enorme mesa que tenían y me tocó sentarme a su lado y enfrente de mi padre.
De primero nos pusieron una extraña ensalada que empecé a picotear porque apenas tenía hambre.
Sentí que el móvil sonó y, disimuladamente lo saqué del bolso y lo miré por debajo de la mesa.
"Aunque te vaya a ver mañana, esa no es razón para no hablar hoy. ¿Qué haces?"
Sonreí.
"Pues ahora mismo estoy cenando en casa de unos amigos de mi padre. Es horrible. Tengo que aguantar a un baboso... No te haces idea. ¿Y tú qué haces?"
"¿Un baboso? ¿Quiere eso decir que uno de los chicos superficiales va tras de ti? Lo que hay que oír. Yo no estoy haciendo nada, oh, bueno, estoy jugando a las cartas con Paul. Te manda saludos :D"
Levanté la cabeza y me encontré con una mirada de mi padre que venía diciéndome esto "Deja inmediatamente el teléfono y compórtate".
"Sí, mañana te cuento, si quieres. Es un sufrimiento que no tiene fin ni remedio D: Que majo Paul, dile algo de mi parte. Tengo que dejarte, papá me está mirando con cara de sospecha. Luego seguimos, cuando no me vea xx"
Seguí comiendo como si nada hubiera pasado e intenté integrarme en la conversación, que recaía en esos momentos sobre Drake.
-Y en eso, mamá, Amy y Tom darán una fiesta el viernes por la noche. De disfraces. ¿No suena divertido? Iremos todos los de clases de nuestro curso.
-Suena divertido. ¿Y tú no vas, Christine?-dijo Julia, su madre, mirándome.
-Ya se lo he dicho yo, mamá, pero no quiere ir.
-¿Yo? Emm... No...
-¿Y eso por qué?-dijo Peter, su padre, visiblemente interesado.
-Pues...Porque no soy de esas cosas, no sé...
-¡Vamos, si irás conmigo! Yo cuidaré de ti.
Falso de mierda. ¿Cuidarme tú, Drake? Sí, claro.
-No, no sé...
-Creo que estaría bien que salgas a divertirte. Irás con Drake a la fiesta.
Taladré con la mirada a mi padre.
¿Qué acababas de hacer, insensato? ¡Le habías dado a Drake lo que quería!
-Ah, pues... Vale, gracias papá.
Asco de vida, macho. ¿Es qué no podíais moriros todos y dejarme? Bueno, todos no. Niall, Marta y Cait no tenían la culpa de mi desgracia ni de que tuviera un padre tan corto de mente.
Cuando terminamos de cenar mi padre y Peter se tomaron unas copas y yo, aprovechando que estaba distraído y que Drake no daba señales de vida, me senté en el sillón y chateé con Niall.
"No te vas a creer lo que me ha hecho mi padre... Me ha traicionado de una sucia manera. A veces desearía no tenerle, de verdad"
"Dices eso porque estás dolida, pero no lo sientes de verdad. ¿Qué te hizo? ¿O prefieres hablar de ello mañana? Quizá no pueda dormir esta noche pensando en qué te pasará y de qué manera has sido traicionada... Y Paul tampoco".
Reí.
"Sí, mejor hablar de ello mañana para que te lo pueda contar mejor. Oye, de verdad, gracias. Eres una persona con la que se puede hablar y me hacía mucha falta alguien así. Duerme tranquilo esta noche que no es nada muy grave... Creo. ¡Y que Paul duerma si no, no podrá protegerte!"
Alguien me quitó el móvil de las manos.
-¡Eh! ¡Dámelo, Drake!
Este se sentó a mi lado en el sillón y miró el móvil.
-¿Con quién has estado hablando toda la noche?
Vio la foto de contacto de Niall.
-¡Vaya...! ¿Quién es este? ¿Es tu novio?
-¡No, no tengo! ¡Dame el móvil!
Alejó el móvil de mi para que no pudiera cogerlo mientras me miraba con una sonrisilla pícara.
-Ah, ya entiendo. No querías ir a la fiesta porque querías quedar con él, ¿verdad? ¿Tu padre sabe algo de tu amiguito?
¿Por qué todo el mundo era igual con lo de "mi amiguito"? ¿Qué pasa? ¿Qué yo no puedo tener amigos o qué?
-¡No, no lo sabe! Y ahora dame el móvil, por favor.
Me miró con sus ojos verdes.
-Mira, hagamos una cosa. Sé que piensas que soy malo, que soy un cerdo, un hipócrita y un chulo, lo sé porque me lo dices todos los días.
-Y un cabronazo. Que no se te olvide.
-Y un cabronazo, sí, es cierto. Puede que tengas razón pero contigo voy a ser benévolo y quiero hacer un trato.
-¿Un trato? ¿Qué clase de trato?
-Sé que quieres pasar la noche del viernes con este... Amigo en vez de conmigo. Lo sé porque lo puedo ver en vuestras conversaciones-dijo, leyendo los mensajes.
-¡Eh no hagas eso!-dije, pegándole hasta que dejó de mirarlos.
-Y el trato es el siguiente. Yo en la fiesta lo único que quiero es que nos vean juntos un rato para que puedan relacionarnos, ya sabes. Después, una vez que nos hayan visto y sepan que estoy contigo, puedes hacer lo que quieras, a mí me da igual, puedes irte con tu amiguito. Así que escucha con atención, porque este es el trato: si tú en la fiesta convences a los demás de que estamos juntos, puedes irte con el chaval y yo no le diré nada a tu padre, al contrario, si pregunta diré que estuviste toda la noche conmigo. De lo contrario, sino lo haces, aunque te quedes en la fiesta, le hablaré a tu padre sobre este chico tan... Interesante. ¿Qué te parece? ¿Aceptas o no?
Le quité el móvil de la mano.
-Eres un capullo, Drake. Pero vale, acepto.
-¡Sabía que lo harías!-dijo, sonriendo con suficiencia.
-Te odio, en serio.
-Bah, pero eso no importa. Lo que sientas por mí es lo de menos lo que importa es lo que piensen los demás.
-¿Cómo puedes tener esa mentalidad, de verdad? Te juro que no lo entiendo.
Se encogió de hombros.
-No importa, hablemos de los disfraces. ¿De qué quieres que vayamos? Quiero que vayamos conjuntados.
-No sé, no me importa.
-Christine, coopera un poquito si no quieres que tu padre sepa algo sobre tu amigo...
-Vale, joder. Tengo en mi casa un disfraz de Campanilla. Así que si quieres ir de Peter Pan...
Rió.
-Vale, está bien, la cosa está en que nos vean juntos. El disfraz es lo de menos. Estaré en la puerta de tu casa esperándote a las siete ¿vale? Tienes una hora para convencer a la gente. Luego puedes perderte por ahí.
-Está bien.
Cuando mi padre anunció que ya era hora de irnos estuve por ponerme a saltar y bailar de plena felicidad, pero no quise hacerlo por si me caía por los tacones y me rompía una pierna o algo.
En el coche, miré el móvil.
"Los chicos siempre me dicen que soy muy bueno escuchando, aunque bueno, contigo soy más bien bueno leyendo, porque como leo tus mensajes... Hahaha. Nos vamos a dormir ya. Mañana te veo, rubia. Buenas noches xx"
Llegamos a casa, metí a Shannon dentro, me puse el pijama y me fui a dormir. Estaba muy enfadada con Drake por el chantaje que me había echo. Ahora tendría que finjir que estaba loca por él, que era otro de sus líos de una noche...
Fui al instituto como todos los días y no pude contarle el trato a mis amigas a la entrada porque Drake se me acercó y me pasó el brazo por los hombros, susurrándome algo:
-Si quieres que la gente te crea mañana, vas a tener que empezar a actuar hoy. Una no enloquece de amor por mí en una hora.
Tenía unas ganas íncreibles de partirle la cara, aunque también de llorar, pero no hice ninguna de las dos cosas y me pasé todo el día pegada a Drake, sorprendiendo a amigas, compañeros e incluso profesores.
-Miss y Mister Castigados del año-dijo Rose al vernos juntos.
Y ella, y dos profesores más, se echaron a reír.
Al fin pude irme a casa a comer y librarme de Drake.
Mi padre me dio entonces una sorpresa.
-Pensé en lo que me dijistes y creo que tienes razón. Ya puedes defenderte por ti sola, aunque Jerry te seguirá acompañando la mayoría de las veces. pero hoy, para irte con tus amigas, no le necesitas y mañana, para ir a la fiesta, tampoco, porque vas con Drake.
-¡Aww! Muchísimas gracias, papá, de verdad.
¡Eso hacía más fácil mi plan! Sí. Tenía otro de mis estupendos planes. Y sí. Tenía que ver con Niall. De hecho, estaba centrado en él.
Subí a hacer los deberes corriendo, la mayoría me los inventé pero los hice tan mal por los nervios que decidí borrarlos y hacerlos otra vez. No, en realidad los hice de nuevo para gastar más tiempo, ya que las horas se me hacían eternas. ¡Parecía que nunca llegarían las seis!
Me duché y, envuelta en la toalla, abrí mi armario para buscar algo que ponerme.
-¿Qué me pongo, Shannon?
Mi perra levantó la cabeza de la alfombra y me miró.
-Sí, tienes razón. Algo bonito a la par que sencillo. Pero, ¿el qué?
Finalmente me decanté por esto:
-Sí vale Shannon ya sé lo que estás pensando, es de todo menos sencillo, pero es que no soy capaz de elegir otra cosa, ¿vale?
Me puse a pintarme las uñas y les mandé un mensaje a las chicas:
"Chicas, lo de hoy con Drake tiene explicación. Hemos hecho un trato en el que depende de como lo mires, salgo perdiendo. ¿Qué digo? Salgo perdiendo un poco bastante, pero también gano algo. Ya os contaré cuando él no esté cerca, ¿vale? Ahora me voy con Niall. Ya os contaré. Besos".
Se me acaban de secar las uñas cuando me sonó el móvil.
"Sal de casa, venga, que aquí estoy esperándote (:"
Me puse las manoletinas corriendo, me despedí de Shannon y bajé corriendo. Salí por la puerta y me quedé blanca al ver a Niall esperándome, tras la verja que impedía el acceso a mi casa, apoyado en un coche.
Salí y me dirigí hacia él.
-¿Qué haces aquí así? ¡Si nos llega a ver mi padre...!
-Yo también me alegro de verte, ¿eh? Ah, exacto. Si nos llega a ver pero no nos ha visto, ¿no? Sube al coche, anda.
Dicho esto, abrió la puerta para que subiera.
Miré hacia atrás para asegurarme de que mi padre no nos había visto, me cercioné de ello y subí.
Cerró la puerta, rodeó el coche, se sentó en el asiento del conductor, arrancó y nos fuimos.
-¿Adónde me llevas?
-¿Es que piensas que voy a secuestrarte? Que quiera hacerlo no quiere decir que lo vaya a hacer. Al menos, no aún.
Sonreí.
-Te llevo a conocer a los chicos, aparte de a una prueba de sonido nuestra.
-¿Qué? ¿De verdad? ¡Oh, gracias!
-No hay por qué darlas.
-¿Y cómo son los demás de la banda? ¿Cómo tú?
-Oh, bueno... Sí. O no. No sé, no sabría decirte. Ahora cuando los conozcas, lo sabrás.
-¿Y si no les caigo bien?
-Eso es imposible. En ese sentido, sí son como yo.
-Si, ¿no?
Y reí.
-Aparte de los chicos, te presentaré también a las chicas, que han podido venir.
-¿A quiénes?
-A sus novias.
-Oh.
A las chicas que han podido venir. ¿Quería decir eso que él tenía novia y no había podido venir?
-Y tú...¿Tú tienes novia?
-¿Qué? ¿Yo? No, no tengo.
-¿Por qué? Se de unas cuantas de la cola de ayer que matarían por ti...
Rió.
-Porque digamos que aún no he encontrado a la chica adecuada.
-Ah, bueno. Me pasa lo mismo.
-Pero bueno, ya aparecerá, no estoy preocupado... Quizá esté más cerca de lo que creo, ¿quién sabe?
-Sí, esas cosas nunca se saben.
-¿Tú no tenías una traición que contarme? Estoy deseando oírla.
-Ah, cierto. Pues verás... Allí en el instituto tenemos una cosa llamada Top 10 fortunas. ¿Sabes lo que es?
-No, ilumíname.
-Es donde están las diez personas con más dinero del instituto. Entre ellas estoy yo, creo en el puesto tres o cuatro, no sé, voy subiendo o bajando. Todo el mundo quiere estar en él, pero no todos pueden. Una forma de aumentar tu porpularidad es juntarte con uno que esté dentro del Top.
-Entiendo. ¿Y ese chico...?
-Drake. Es un capullo, perdona que use una palabrota delante tuya.
Rió.
-Nada no pasa nada. Sigue.
-Hay una fiesta mañana a la que iremos todos los de nuestro curso y él quiere que allí convezca a los demás de que estamos juntos porque sino le hablará de ti a mi padre. Yo no quería ir, pero mi padre me obliga.
-¿Cómo sabe él que tú y yo...?
-Me quitó el móvil ayer. Y yo le dije que lo haría.
-¿Qué? ¡No! No hagas eso si no quieres hacerlo. Si quiere hablarle de mí a tu padre, que lo haga, pero tú no hagas nada que no quieras.
-Pero es que él me dijo que si lo hacía, me dejaría irme contigo después y no le diría nada a mi padre. Y yo quería decirte si podríamos vernos mañana también. Si pudiéramos, me sacarías de esa fiesta infernal.
-¿A qué hora empieza la fiesta?
-A las siete y media y Drake me dijo que con una hora bastaba para converncer a la gente, así que a las ocho y media ya podría escaparme.
-¿Y a qué hora tendrías que estar en casa?
-Contando con que es viernes, estoy en una fiesta y llevaría el móvil... No hay límite.
-Perfecto, entonces me da tiempo a recogerte, que veas el concierto y después ir a cenar. ¿Te parece un buen plan?
-¿Bromeas, verdad? No me puedes estar diciendo eso en serio.
-¿Y qué ganaría si fuera mentira? No, es cierto. Pero bueno si te quieres quedar en la fiesta con tu amigo Drake, eso ya como tú veas...
-¿Qué? ¡No! ¡Quiero ir contigo!
-Ah, eso ya me gusta más.
-Pero no te pongas rojo, ¿eh?
-Vale rubia.
-¡Eh!
Nos reímos los dos.
-Y después mandaré a Drake muy lejos.
-Me parece bien. Ya hemos llegado.
Aparcó y me ayudó a salir del coche.
-Ven, es por aquí.
Le seguí aunque a paso lento.
-¿Qué te pasa?
-Me... Me da algo de vergüenza. Es que con ellos no me choqué en una tienda de ropa y huí después.
Rió.
-Venga, ven, no te pasará nada. Verás como no tienen nada que ver con los chicos de aquí.
Me cogió del brazo, como el día que huimos y me llevó adentro de un edificio, después, me guió por una interminable red de pasillos hasta que salimos a un escenario donde había un grupo de chicos, unas chicas y gente que iba y venía colocando cosas y hablando sobre cosas de las que no me enteré.
-¡Mirad ahí está Niall!
-¡Y la trae con él!
-Es guapa.
-Harry, no.
-Vale, Louis.
Niall me llevó a dónde estaban los chicos, se paró y me soltó el brazo.
Saludé con un tímido hola moviendo la mano.
-Ho-hola.
-¡Así que tú eres la mítica Christine!-dijo un chico con el pelo castaño corto, dando un paso hacia mí.-Niall no ha hecho más que hablar de ti desde que os conocísteis.
-¡Liam!-le regañó Niall.
-Bueno, entonces estamos igualados, porque yo tampoco he dejado de hablar de él. Mis amigas tienen que estar hasta las narices.
Nos reímos todos.
Reparé entonces en dos chicas que había.
¿Serían esas sus novias?
Me los fue presentando uno por uno. El más alto con los rizos era Harry, el del pelo negro Zayn, Liam el primero que me habló y Louis el del pelo castaño con los ojos claros.
Le tocó entonces el turno a las chicas.
Primero se me acercó una chica con el pelo muy largo castaño claro, alta y esbelta, bien arreglada y con unos bonitos ojos verdes.
-Yo soy Ashely, pero puedes llamarme Ash. ¡Es un placer conocerte al fin! Niall no hacía más que hablar de ti y teníamos ganas de ver si eres como él decía.
-Ash, por favor...-dijo él, enrojeciendo.
Me di la vuelta, le saqué una foto con él móvil y se la enseñé.
-Y ahora no me digas que no enrojeces, irlandés.
Reímos y me di la vuelta para conocer a la última chica que me quedaba que era más o menos de mi altura, con el pelo más o menos por los hombros y castaño claro, casi podría decirse rubio y ojos color miel.
-¡Al fin tenemos la oportunidad de conocerte! Soy Sam. Y ahora que nos conocemos y mientras los chicos hacen la prueba, vamos a hablar.
Me agarraron cada una de un brazo y empezaron a andar.
-¡Niall! ¡Me secuestran!
-¡Tú tranquila, que si piden rescate ya lo pago yo!
Me dejé arrastrar de nuevo por los pasillos, aunque ahora sin la compañía de Niall y llegamos a un cuarto que se asemejaba bastante a un saloncito.
-Siéntate si quieres-dijo Ash.
Me dejé caer sobre el sillón y luego ella se sentó a mi lado.
-¿Algo de beber? ¿Un café, una Fanta, Coca- Cola...?-preguntó Sam.
-Una Coca Cola estaría bien.
-Que sean dos-dijo Ash.
-Serán tres-dijo Sam, poniéndolas en la mesa.
-Y bueno, vosotras diréis de qué queréis hablar.
-Niall nos lo ha contando muchas veces, el cómo os conocísteis, pero ahora queremos oírlo desde tu punto de vista-dijo Ash.
-Ah, claro. Pues veréis, yo iba...
Y se lo conté.
-Y habláis mucho por el móvil, ¿no?
-Sí, chateamos bastante. ¿Adónde queréis ir a para con todo esto?
Ellas rieron.
-A ningún sitio, sólo queremos saber algo más de vosotros. Y ahora hablános de ti.
Les contesté a todas las preguntas que me hicieron. Me hacían sentir como si estuviera en una entrevista, aunque estas chicas eran más majas que cualquier entrevistador o entrevistadora con el que hubiera trabajado antes.
-Y así fue como...
Me callé al ver que los chicos y Niall entraban en la puerta.
-¡Estás aquí, Chris! Creí que te habían secuestrado de verdad.
-Ya estabas sufriendo por ella.
Ash le sacó la lengua y Niall le devolvió el gesto.
-No sufría, pero es que yo quedé con ella y vosotras me la quitásteis. Las cosas, como son.
Se dejó caer en el sillón a mi lado mientras los demás también se sentaban.
Sentí que todos me miraban y me daba algo de corte, después de todo, yo era la nueva allí, lo novedoso y claro...
-¿Quién nos iba a decir, Niall cuando llegamos aquí que nos haríamos amigos de la hija de Jared Steward, eh?-dijo Harry.
-Todo el mérito es mío.
-Bueno, yo también tengo parte de mérito porque ya sabes, estaba ahí para que te chocaras y claro...-dije.
Reímos todos.
-¿Te veremos más veces por aquí?-preguntó Zayn.
-Siempre y cuando pueda escaparme, sí, por aquí me tendréis.
De nuevo empezaron las preguntas y yo no tuve ningún problema en contestar a todas y cada una de ellas.
-Será mejor que te lleve a casa ya-dijo Niall cuando vio que estaba hasta el gorro de preguntas pero no lo decía-Si mañana vamos a salir, no quiero abusar.
-Ah, pero, ¿qué habéis quedado para mañana?-preguntó Sam.
Niall se levantó del sillón y me tendió una mano para ayudarme a mí. Yo la acepté, la cogí y me levanté.
-Es... Una historia larga de contar. Ya os la contará Niall si quiere.-dije.
-Niall, cuando vuelvas-dijo Louis-Ya estás empezando a cantar.
-¿Qué canción?
-¡Me refería a la historia!
-Sí ya lo sé, ya.
-Bueno chicos no me despido mucho que nos vamos a ver mañana, ¿si?
No quería entrenerme en despedidas, pero finalmente lo hice, repartiendo algún que otro beso en la mejilla y eso. Finalmente, Niall y yo pudimos escaparnos por los pasillos dirección al coche.
-¡Tus amigos son íncreibles, tenías razón! ¡No son para nada como la gente de aquí! Ha sido fantástico poder conocerlos. En serio, gracias por dejarme hacerlo.
Él sonreía.
-A veces suenas muy inocente, Chris, ¿sabes?
-Lo siento, es que no estoy acostumbrada a estas cosas.
-No te disculpes por ser adorable, ¿ves que yo lo haga? Pues entonces tú tampoco.
Reí.
-Debo sonarte muy repetitiva, Niall... Pero gracias, de verdad. Hace apenas tres días que te conozco y has cambiado completamente mi mundo para mejor. Así que gracias por escucharme, por sacarme de casa, por presentarme gente tan maja y, en fin, por dejarme ser tu amiga y compartir tu mundo.
Recibí un abrazo por respuesta.
Tardé en reaccionar, ya que no me lo esperaba y además, no estaba nada acostumbrada, así que me quedé rígida, con los brazos pegados al cuerpo.
-Oh, lo siento-dijo, separándose de mí-Perdona si te he molestado, pero es que soy muy propenso a esto...
-¿Me pides perdón por darme un abrazo? ¿Y ahora quién es el que está sonando inocente, eh? No me has molestado. Solo me has sorprendido. Aquí la gente no es así.
-Ah, bueno. Pero lo siento igualmente.
-Yo no. ¿Crees que podrías hacerlo otra vez? No recibo muchos abrazos en mi vida, ¿sabes?
No tuve que decirlo dos veces.
Me gustaba esa sensación. Era un abrazo de verdad. Reconfortante. Mi padre no era para nada de dar abrazos y mis amigas, sí, me abrazaban pero no se podía comparar a esto. Creo que la última que me dio un abrazo sincero fue mi madre.
-Gracias-dije, al separarnos-Me hacía falta.
-Cuando quieras, aquí hay más. De esos tengo muchos.
Reí mientras me sentaba en el coche.
Verdaderamente, Niall era un amigo legal. Había tenido mucha suerte de dar con él. Podía desahogarme sin ser juzgada y encima me apoyaba y reconfortaba. Sí, estaba muy contenta con mi nuevo amigo.
-¿Y quién era la novia de quién? Es que no les pregunté, sería raro...
-Ash sale con Louis y Sam con Liam.
-Entonces Zayn y Harry están solteros.
-Y yo.
-Y tú, cierto.
-¿Qué pasa, es que te interesa alguno de ellos?
-¿Qué? No seas enreda, anda.
Rió.
De vuelta a casa estuvimos hablando del plan de mañana, perfeccionándolo.
Finalmente, detuvo el coche enfrente de la verja de mi casa.
-Bueno, pues nos vemos mañana entonces.-dijo.
-El día de mañana se presenta mucho más prometedor ahora que vamos a hacer algo juntos. De verdad, gracias.
-Algún día se te agotará tu reserva de gracias. No tienes nada que agradecerme, en serio.
-¿Luego hablamos?-dije, enseñándole el móvil que tenía en la mano.
-Por supuesto. Aunque debes de pensar que soy un pesado, porque no hago más que hablarte y hablarte por el móvil...
-¡En absoluto! Me encanta que lo hagas.
Sonrió.
-Eh, Niall. Antes me diste un abrazo y no pasó nada. ¿Crees que pasará algo si te doy un beso en la mejilla?
-Que quizá me acostumbre y otro día quiera más.
Reí con ganas.
-Cuando quieras, aquí hay más. De estos tengo muchos.
Sonrió al reconocer la frase que él dijo antes.
Me incliné sobre el asiento y él puso la mejilla.
Y le besé.
-Gracias de nuevo por todo. Mañana nos vemos, irlandés.-dije mientras salía del coche.
Cerré la puerta, me despedí con la mano y esperé a que él se marchara para entrar en la casa.
-¡Hola, bonita!-dije agachándome para abrazar a Shannon.
Estaba muy contenta.
¿Qué mañana tenía que finjir que quería a Drake? No importaba. ¿Lo que la gente pensara de mí después de eso? Tampoco. Eso nunca me había importado.
Y además, yo apenas pensaba en la fiesta, sino en la cara que se le quedaría a Niall cuando me viera aparecer disfrazada de Campanilla, ya que me se olvidó decirle que era una fiesta de disfraces.
¡Hola! Aquí estoy yo con mis míticos comentarios después del capítulo. No tengo mucho que comentar aquí, así que... Pues nada, que muchas gracias por leer y que espero que os esté gustando la novela tanto como me está gustando a mi (:
Me encanta, podrías publicar un libro o algo parecido eh, ahora soy fan tuya en serio, siguela, o me mataras jaja
ResponderEliminarAlex xx
Hoola! :) Me encanta como ya sabes jejeje :) Un beso de tu hermana Directioner :)
ResponderEliminarUn Besazo preciiosa! :) Sigue haciendo así de boniitos los capitulos y me darás una alegria jajaja (:
Bueno aDios y besos.
AT:Love One Direction :)
Hola!!! Como sabes me encanta Forever Young, i esta novela tambien!!!! Es increible :D Me e leido los 4 capitulos en nada! :D
ResponderEliminarNecesito maaaasss!!!! ;D
Escribes increiblemente genia! Besos!! :D
Madre mia!!! me encanta forever young pero esta es jbhudbgyhfbdh me encanta enserio! siguiente porfavor!!! es muy interesante, me acabo de leer los cuatro capis de golpe esta realmente chula, escribes genial :) siguela por favos (?) te quiero Cris!! Besos!:)
ResponderEliminarMe encanta! :)
ResponderEliminarSiguiente yaa!! :D